Que
los alumnos a través de situaciones didácticas, aprendan haciendo funcionar el
saber, o más bien, de que el saber aparezca para el alumno como un medio de
seleccionar, anticipar, ejecutar y controlar las estrategias que aplica a la
resolución del problema planteado por la situación didáctica y pueda conducir
paso a paso, al descubrimiento de los conocimientos en la matemática y que se
den cuenta que la matemática es mucho mas que aprender fórmulas y resolver
operaciones.
OBJETIVO
PARTICULAR
Que
los alumnos se enfrenten a situaciones didácticas que los hagan pensar, buscar
caminos, proponer soluciones, argumentar ideas, distinguir razonamientos
correctos de los erróneos.
OBJETIVO
ESPECIFICO
Que
los estudiantes a través de sus conocimientos adquiridos razonen en forma
ordenada y sistemática, les permita abordar, plantear y resolver problemas,
además de desarrollar su capacidad de análisis.
INTRODUCCIÓN
La
teoría de situaciones didácticas tuvo su origen en Francia; se ha desarrollado
e implementado en diversos sitios del mundo y ha alcanzado hasta el momento
resultados sumamente interesantes. Aunque esta teoría fue concebida para el
campo particular de la didáctica de la matemática, hoy se busca su extensión a
otros dominios del conocimiento y en diferentes niveles de escolaridad. Con
esta teoría, se estudian y modelan fenómenos didácticos que ocurren cuando un
profesor se propone enseñar una noción, un teorema o un procedimiento a sus
estudiantes. En este intento, las palabras, enseñar, aprender, pensar, entender,
saber y conocer adquieren diversos significados. Así pues, esta teoría de
situaciones permite diseñar y explorar un conjunto de secuencias de clase
Concebidas
por el profesor con el fin de disponer de un medio para realizar un cierto
proyecto de aprendizaje. actitud positiva hacia las matemáticas consiste en
despertar y desarrollar en los alumnos la curiosidad y el interés por investigar
y resolver problemas, la creatividad para formular conjeturas, la flexibilidad
para modificar su propio punto de vista y la autonomía intelectual para
enfrentarse a situaciones desconocidas; asimismo, consiste en asumir una
postura de confianza en su capacidad de aprender. La participación colaborativa
y crítica resultará de la organización de actividades escolares colectivas en
las que se requiera que los alumnos formulen, comuniquen, argumenten y muestren
la validez de enunciados matemáticos, poniendo en práctica tanto las reglas
matemáticas como socioculturales del debate, que los lleven a tomar las
decisiones más adecuadas a cada situación.
Mediante
el estudio de las matemáticas se busca que los jóvenes desarrollen una forma de
pensamiento que les permita expresar matemáticamente situaciones que se
presentan en diversos entornos socioculturales, así como utilizar técnicas
adecuadas para reconocer, plantear y resolver problemas; al mismo tiempo, se
busca que asuman una actitud positiva hacia el estudio de esta disciplina y de
colaboración y crítica, tanto en el ámbito social y cultural en que se
desempeñen como en otros diferentes. Para lograr lo anterior, la escuela deberá
brindar las condiciones que hagan posible una actividad matemática
verdaderamente autónoma y flexible, esto es, deberá propiciar un ambiente en el
que los alumnos formulen y validen conjeturas, se planteen preguntas, utilicen
procedimientos propios y adquieran las herramientas y los conocimientos
matemáticos socialmente establecidos, a la vez que comunican, analizan e
interpretan ideas y procedimientos de resolución.
Los
contenidos que se estudian en la educación secundaria se han organizado en tres
ejes:
Sentido
numérico y pensamiento algebraico; Forma, espacio y medida y Manejo de la
información.